Por W. Vincent Clifford

Introducción 

Como abogado defensor, con frecuencia me preguntan: "¿Cómo puede defender a esos delincuentes?" Mi respuesta es que las personas acusadas en nuestro sistema se supone que son inocentes. Asimismo observo que cualquiera que haga esa pregunta debe estar suponiendo que el acusado al que se está defendiendo es culpable. Esta respuesta con frecuencia hace que la persona lega en la materia replique: "¿Cómo puede citar una presunción para justificar defender al culpable?" La respuesta a este reto es preguntar: "¿Quién debería decidir la culpabilidad o inocencia? ¿Debería ser un abogado basándose en información no juramentada ni probada que aparece en la declaración de un testigo, archivo policial o informe de prensa, o, debería ser un juez o jurado, una vez que se hayan examinado todas las pruebas para determinar su admisibilidad y su fiabilidad?" A veces parece obvio que el cliente ha cometido el delito, pero las primeras impresiones pueden ser erróneas. Ha habido casos en que personas inocentes han confesado haber cometido delitos. Ha habido muchos casos en que personas inocentes han sido identificadas equivocadamente por testigos que manifiestan estar seguros al 100% en cuanto a la identificación. A veces personas aparentemente culpables tienen también eximentes válidas legalmente (o en cuanto a los hechos). A veces las personas inocentes mienten porque no confían en que la verdad vaya a ponerlos en libertad, y por consiguiente puede parecer que son culpables. 

Ya es suficientemente difícil determinar la culpabilidad después de un juicio. En Canadá ha habido varias condenas injustas que han atraído la atención del público 2 incluso después de juicios largos y complejos. En muchos casos del pabellón de los condenados a muerte en los Estados Unidos, ha aparecido nueva información que elimina toda duda sobre la absoluta inocencia de personas que fueron condenadas "fuera de toda duda razonable". Si es tan difícil acertar después de un juicio, ¿cómo puede determinarse la culpabilidad con confianza sin un juicio? Incluso si quisieran defender sólo al inocente, los abogados defensores no podrían hacerlo sin intentar primero juzgar quién es inocente y quién culpable. Si todos los abogados empezaran a prejuzgar la culpabilidad de sus clientes, entonces se correría el riesgo de que a los verdaderamente inocentes se les niegue una defensa letrada. La única forma de defender al inocente es defender a todos. Está lo bastante mal que la sociedad suponga la culpabilidad antes de un juicio, incluso cuando dicha suposición se base en información aparentemente incriminatoria; sería desorbitado que los abogados defensores hicieran lo mismo. El trabajo del abogado no es juzgar a sus clientes; de eso se encargan el juez o el jurado. El sistema judicial sólo puede proteger al inocente si los que son responsables de administrarlo están preparados para suponer la inocencia.


PUBLICADO POR: FRANCISCO PORTILLO

Abogado Egresado de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras, Me encanta el Derecho y mi objetivo es servir con excelencia a mi país y mis Semejantes.

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